La penúltima ruta de la temporada ,
después de varios cambios de fecha , la hicimos el sábado día 30 de mayo. La cima del Djebel Musa a
851 metros de altitud nos esperaba , pero íbamos a tener que hacer
un buen esfuerzo , el día se presentaba mas bien caluroso y no hacía
mucho viento.
Todo el grupo cumplió el horario de
presentación , se había optado por salir a las ocho de la mañana para favorecer a los que venían desde
la Bahía de Cadiz y evitarles un madrugón excesivo , aunque
era consciente de que no nos sobraría
mucho tiempo a la vuelta al Puerto de Ceuta . La travesía se hizo
bastante amena , entre fotos y charlas .
Nada mas bajar de barco ,
nos estaba esperando Rafa y el autobús que nos llevaría a Bel
Younech , a treinta y cinco personas, incluyendo los dos guías.
El hecho de ser una ruta en otro
Continente , aunque lo tengamos a vuelo de pájaro , y en otro país , lo pudimos comprobar en el autobús al
paso de la Frontera del Tarajal, en su lado mas desagradable, los
tramites se alargaron bastante mas de lo previsto , por el cambio de
turno del personal marroquí.
A partir del paso de la Frontera ,
todo se desarrolló con normalidad, en menos de media hora ya
estábamos bajando del bus y preparando las mochilas.
A unos
quinientos metros de donde empezamos a andar, atravesando el pueblo
y casi sin tiempo a calentar las piernas,...
...comienza el primer tramo de subida hasta el Collado, son unos cuatro kilómetros en los que se sube un desnivel de casi 600 metros, aunque
el ritmo no fue alto , el grupo , bastante heterogéneo en cuanto a su nivel , se alargó , y a
la mitad de este primer tramo se formó un grupo cabecero con el guía al frente y el resto bastante
disgregado , con el segundo guía haciendo labores de escoba.
Se confirmaba la posibilidad de que no
todos los componentes de la expedición podrían alcanzar la cumbre. Me descolgué hasta la cola
para ver como estaban los de atrás e indicarles lo que nos quedaba
hasta el collado . Guillermo consiguió que Josefina , que cerraba el
grupo mas retrasada , le dejara subirle la mochila hasta el dicho punto , en un gesto solidario.
Una vez que estábamos todos , cada uno por decisión propia , tomó
una de las dos opciones posibles; seguir hacia la cima o bien aprovechar para comer en el collado y
continuar la ruta con el segundo guía , sin esperar a que el otro grupo bajara y tomar la delantera
para evitar futuros retrasos , de hecho este grupo terminó la ruta con media hora de antelación a
los que subimos a la cima y tuvieron tiempo de tomarse un té.
El grupo que partió para la cima , con
veintitrés componentes, tendría que haber sido de algunos mas, pero lo cierto es que la pared
que teníamos enfrente impresionaba y no se veía sendero por
ningún sitio , en estos casos hay que
respetar la decisión que cada uno toma y no presionar a nadie.
Con un desplazamiento en zig zag , de
izquierda a derecha se salva casi todo el desnivel de la pared con el consiguiente de derecha a
izquierda , ya entre las rocas y con bastante precaución , se alcanza
la parte alta de la montaña , dando
vista a la cima a menos de trescientos metros continuando a la izquierda , pero ya sin ninguna
dificultad.
Ahora tocaba descansar un poco, almorzar y darle trabajo a las cámaras de foto . En
cuanto a las vistas , solo se pudo disfrutar de las de la parte donde nos encontrábamos , hacia la Península
no tuvimos en ningún momento una visibilidad suficiente para hacer buenas fotos , aunque
testimonio gráfico de gran calidad de toda la ruta hay bastante.
La bajada hasta el Collado,
se hizo con mucha precaución, alargando el grupo con la intención de que no hubiera nadie
andando por encima de los demás , por si rodaba alguna piedra que no golpeara a nadie.
La bajada que
comunica el collado con la zona próxima a la costa , donde se encuentra el pozo, también tiene
su complicación y el grupo se alargó bastante , en el pozo se hizo la reagrupación y nos refrescamos
un poco .
Ya teníamos a la vista la Isla de Perejil , por un bonito sendero llegamos a la costa ,
quedando el tramo paralelo a la misma en dirección Este , al final hay que subir un buen desnivel
para llegar a la altura de Punta Leona , tener vistas al pueblo y las barcas en la playa junto a la
Frontera de Benzú. El camino al pueblo desde esta zona , lo están arreglando y parece que lo vayan a
asfaltar , lo que sin duda le quitará encanto al final de la ruta.
En el regreso a Ceuta no tuvimos
retraso en la frontera y nos dio tiempo a tomarnos una cerveza antes de embarcar , después de la foto
de grupo en la puerta de la Estación Marítima.
Solo me queda agradecer a los
participantes , Socios e Invitados, su excelente comportamiento.
Texto: Alberto Escalona
Fotografia: De varios del Grupo Djebel Musa
Fotografia: De varios del Grupo Djebel Musa